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LVIII FORO DE DEBATE JUBICAM

CRISIS SOCIAL Y NUEVAS CAJAS-BANCO
UNA APROXIMACIÓN A INQUIETUDES Y SITUACIONES PERSONALES
(Comentario de Vicente Llopis Pastor)


     El pasado martes 4 de octubre de 2011 se inició el séptimo ciclo de los Foros de debate que viene organizando Jubicam desde el año 2005 y que a lo largo de este periodo ha tratado diversidad de temas económicos, sociales, culturales e intelectuales, en los que se plantean cuestiones que afectan a las relaciones intergeneracionales y aspectos que tienen que ver con el mundo de las personas que hemos dedicado nuestro trabajo a la Caja de Ahorros del Mediterráneo. Y se inició con el LVIII Foro que trató sobre el tema “Crisis social y nuevas Cajas-Bancos.- Una aproximación a inquietudes y situaciones personales” que estuvo a cargo de la Doctora doña María Asunción Martínez Román, Catedrática de Psicología de la Universidad de Alicante; Miembro del Comité Ejecutivo del EASSW y Secretaria del Departamento de Trabajo Social de la Universidad Alicantina.

     Como es habitual, don Francisco Bernabéu Penalva hizo la presentación de la ponente, de la que recordó la gran amistad que les une y a quien conocía por haber sido condiscípula de su propia hija en su época estudiantil, amén de haber sido una pionera colaboradora en la promoción social de la Caja de Ahorros del Mediterráneo. Doña María Asunción Martínez Román agradeció la presentación y remarcó los muchos años de colaboración con la CAM y su Obra Social, planteando el tema de la conferencia como una exposición “de colegas a colegas” y para la cual se iba a servir de estudios, documentaciones y manifestaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Haciendo uso de medios audiovisuales replanteó el título de la ponencia que pasó a ser “La ciudadanía no se jubila.- Corresponsabilidad social, derecho y deber de participación social”.

     Inició su exposición partiendo del concepto de “paradigma”, en el sentido de lo que los expertos entienden por consenso como lo verdadero y cierto dentro de las Ciencias Sociales y a partir de ello incorporó el paradigma de desarrollo humano que admite la ONU, así como otras consideraciones en relación con los problemas sociales que siempre son evitables. Estructuró su charla en tres partes: 1) Paradigma del desarrollo humano sostenible; 2) Modelo social de la Unión Europea; 3) Modelo del estado del bienestar en España. En cada uno de ellos expuso lo siguiente:

1) Paradigma del desarrollo humano sostenible.

     Partiendo de que en épocas anteriores el desarrollo humano se entendía tan solo como que las personas habrían de tener lo suficiente para cubrir sus necesidades vitales, es decir, comida, abrigo y poco más, la ponente pasó al paradigma actual, en el que las personas han de tener larga vida, buena salud, educación, nivel de comportamiento, libertad política, garantía de derechos humanos, respeto a uno mismo, respeto a los demás, sentirse más libres y en general una serie de consideraciones que la sociedad ofrece, defiende y protege.

     El individuo ha de sentirse más libre, no querer que otros decidan por él, ser beneficiario y actor de algunos hechos vitales, fomentar el asociacionismo y en general definirse como capital humano y social que cubre sus intereses en un sistema económico, político y social que se lo permite y que, de esta manera, se transforma en democracia. El capital social se favorece con el trabajo cooperativo, el cual da confianza y reciprocidad y de esta manera evita la pobreza humana y la exclusión social.

2) Modelo social de la Unión Europea.

     Se refirió la ponente a las orientaciones de las políticas de la Unión Europea. Para la década de 2000-2010 se buscó el crecimiento económico. Para los años 2010-2020 se persigue el incremento de empleo, relaciones intergeneracionales, cooperación, crecimiento inteligente, sostenido e integrado y otros aspectos adicionales que hacen a la sociedad más moderna y solidaria.

3) Modelo del estado del bienestar en España.

     Partió de la situación en nuestro país, con aspectos de algunas bolsas de pobreza, recorte de gasto público,  crisis económicas,  dependencia energética y otros. Existe una tendencia a que cada uno actúe por su cuenta y las ayudas sociales se canalizan a través de golosos “mercados”, en los cuales se incluyen las personas mayores y también la incertidumbre de los ciudadanos sobre su futuro en cuanto a pensiones y estabilidad económica.

     Citó algunos casos que se están dando en España de reforma de las pensiones, disminución del gasto social y la incorporación del “mercado” para solucionar estas cuestiones, citando a este respecto el informe del Sr. Rodríguez Cabrera del año 2009.

     Presentó una visión de nuestro país en el que no falta paro, pobreza, exclusión, desatención infantil, transmisión intergeneracional, necesidad de sanidad de larga duración, recortes sociales, emigración española de alta cualificación, y otros; a los que comparó con el caso de Finlandia como ejemplo de perfección social.

     Los desafíos para España son múltiples y han de ir por el camino de repensarlos, mejorar la información, rendición de cuentas, gobernanza doméstica y transparencia;  para todo lo cual se han  de cambiar muchas reglas y normativas, decidir entre todos y ejercer nuestros derechos en la búsqueda de la inclusión social. Matizó que la diversidad social se logra mediante la negociación como punto básico del desarrollo humano.

     Para finalizar expuso el siguiente texto en la pantalla “La ciudadanía no se jubila” (“Una sociedad para todas las edades”; Congreso celebrado en Alicante en el año 1999 por la Caja de Ahorros del Mediterráneo y organizado por la Agrupación Europea de Jubilados y Pensionistas de Bancos, Cajas de Ahorros e Instituciones afines).

     El posterior debate con el auditorio fue muy intenso y de gran riqueza expositiva. Intervino F. Bernabéu en relación a los cambios habidos en la CAM que no deben afectar a sus jubilados, las relaciones integeneracionales y la declaración del Acta Social Europea, en la que se dice que no puede haber Europa sin la participación social e intergeneracional; Navarro Albert, sobre la actitud social no demasiado participativa, incluyendo el individualismo de los alicantinos; al que la ponente contestó que hay que actuar políticamente para poder influir y con voluntad para actuar y así se evitaría el aislamiento y la soledad del individuo y resurgiría una nueva ética; F. Bernabéu, sobre la existencia de grupos de voluntarios muy activos y la soledad con que se ha encontrado la CAM en sus relaciones con la autoridad monetaria española; un grupo de jubilados de Murcia, que siguieron el debate por videoconferencia, preguntaron sobre el desarrollo social de Finlandia, al que la Dra. Martínez contestó que allí hacen uso de políticas de abajo a arriba y tienen una ética total sobre el pago de impuestos; R. Carratalá, sobre las actitudes de una sociedad en la que “el que protesta molesta” y el freno social que ello supone; Escolano, sobre algunos aspectos políticos y gubernamentales de los impuestos y de la actuación de la Administración Pública, ante lo cual no es extraño que surja la crispación; V. Llopis, sobre la evolución del estado del bienestar en Europa después de la Segunda Guerra Mundial hasta el actual momento de generalizada crisis financiera internacional; García Mascuñán, sobre el futuro de la Obra Social de la CAM que puede desaparecer con la nueva situación financiera de la entidad. Finalizó F. Bernabéu dedicándole unas palabras de gratitud a la ponente doña María Asunción Martínez Román, a quien dijo textualmente “no nos abandones”.

     Este LVIII Foro de debate ha supuesto un verdadero aldabonazo a las conciencias de los oyentes. Un correcto paradigma de lo que ha de ser el desarrollo y la conducta social. Nos quedó el buen sabor de boca de la excelente exposición de la Dra. Martínez, lo que sirvió para meditar sobre los hechos y razonar sobre las vicisitudes por las que están atravesando las sociedades occidentales y, sobre todo, la sociedad alicantina y las grandes oportunidades de servicio que pueden ser llevadas a cabo gracias a unas correctas relaciones intergeneracionales. De todas formas, quedó patente que siempre habrá una iluminadora luz que haga desaparecer cualquier oscuridad social que pueda presentarse. 

Fotos: Antonio Aura

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