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Me he sentido
enlazada a tu cuerpo.
Me abrasaban tus ojos añil.
Me enredaba
despacio en tus besos
y fundida contigo
me sentí morir
Por un instante
lo pude pensar…
era tan feliz…
Con solo tenerte
mi sueño cumplí.
Y cuando Dios quiera
me puede llamar,
ya puedo morir
porque en esta vida,
aunque fue un instante,
fuiste para mí.
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