Efluvios de primavera,
aromas de rosa y jazmín
llenan hoy mi jardín
y hacen más grata la espera.
Vuelan mil mariposas;
las abejas su vuelo dirigen
allá donde se perciben
las flores más apetitosas.
Todo es alegría y color.
Es la vida que regresa
amparada en el tibio calor.
Mientras, Cupido, ese traidor,
en su empeño no cesa,
lanzando dardos de amor.
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