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XXI FORO DE DEBATE

 

MAYORES E INTERCULTURALIDAD

 

Vicente Llopis Pastor                                 

 

De impactante, extraordinario y motivador puede calificarse el tema tratado en el XXI Foro de Debate que celebramos el martes día 12 de junio en el salón de actos del edificio de la calle San Fernando 40 de Alicante, bajo el título de “Mayores e interculturalidad” y del que fue ponente don Enrique Romá Romero, Licenciado en Veterinaria por la Universidad de Murcia, Diplomado en Educación Social por el Colegio Oficial de Educadores de la Comunidad Valenciana y Jefe de la Unidad  de O.B.S. – Solidaridad y Desarrollo Social de la CAM.

Ya la propia presentación del tema y del ponente fue un brillante ejercicio de motivación de don Francisco Bernabéu Penalva, de quien aprendemos continuamente, y que en este caso supo centrar el tema y comentar dos encuestas previas elegidas al azar que nos daban una cierta sensibilidad pero un bajo conocimiento de las causas y efectos de lo que es el fenómeno de la inmigración que se está incorporando a la sociedad española. En la encuesta se asumen algunos comentarios estereotipados sobre el nivel educativo, aportación al PIB, edades, fallecidos en el intento de llegar a las costas españolas, nivel de riqueza y tantos otros condicionantes, que hacen de los inmigrantes un sector económico, social y cultural nuevo y que supone retos para nuestro país y para todos y cada uno de nosotros. Felicidades a nuestro amigo Paco por la citada presentación y por saber capitanear de forma tan eficaz los temas intergeneracionales, así como por ser el adalid de nuestros Foros de Debate.

 

 

A continuación el ponente, don Enrique Romá Romero, haciendo uso de excelentes medios didácticos e ilustraciones fotográficas plasmadas por ordenador y proyectadas en pantalla, realizó una destacadísima intervención. El contenido de lo expuesto por el ponente es fruto de sus estudios y de su propia experiencia, por lo que su conocimiento lo es tanto en aspectos teóricos como prácticos y, desde luego, hizo patente su compromiso y misión personales en temas de inmigración, marginación e interculturalidad.

Se basó en los ejemplos y experiencias propias que ha vivido en diversos lugares, tales como ver a los niños extranjeros que observan desde las costas africanas, a sólo catorce kilómetros de distancia, la playa española de Algeciras. Esa circunstancia, unida a la facilidad de los medios de comunicación audiovisuales que muestran nuestras mejores condiciones de vida, generan múltiples causas de este fenómeno de la inmigración hacia Europa y en particular hacia España, y que de forma tan tópica llamamos pateras o cayucos, que no sólo salen de las costas de Marruecos sino que cada vez más su singladura en alta mar lo es desde miles de kilóme-tros de distancia originándose desde las costas de Mauritania y de Se-negal, transformando la travesía en una azarosa aventura y en ocasio-nes en una tragedia. Amén de estas consideraciones nos presentó una serie de cifras que resultan apabullantes; por ejemplo, dos millones setecientas mil personas malviven  con  menos  de dos dólares al día;

 

 

treinta y cinco mil niños mueren de hambre al día; en nuestro país hay novecientos mil niños obesos y en esas cercanas costas africanas viven ochocientos cincuenta y dos mil niños famélicos. Datos espeluznantes.

Tampoco faltaron explicaciones para el empobrecimiento de estos países, entre cuyas causas están: la deuda externa, con los excesivos planteamientos de capitalismo financiero auspiciados por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional y que solamente computando los intereses exigidos por esta deuda ya hacen empobrecer a los países; las actividades de las empresas transnacionales, que expolian las materias primas, entre ellas el petróleo, a cambio de concesiones leoninas y en las que generalmente el gobernante o dictador del país percibe suculentas comisiones colocadas en depósitos a su favor en bancos occidentales; y el comercio injusto, en el que predomina una asimetría total y en el que los productos de estos países africanos apenas son adquiridos por las economías occidentales.

No está de más recordar algunas cifras que, tanto en valores absolutos como comparadas entre sí, nos parecen indignas. Por ejemplo, con cincuenta mil millones de euros se acabaría totalmente el hambre en estos países en sólo nueve años; con diez mil millones de euros no existirían sus problemas de escasez de agua. Comparémoslos con los cuatrocientos cincuenta mil millones de euros que ha costado hasta ahora la intervención, guerra e invasión de Irak. Y el tema no parece llevar caminos de convergencia ya que la relación de renta entre países pobres y ricos se ha ido ampliando y desde una relación treinta a uno en los años sesenta se pasó de ochenta a uno en los años ochenta y en la actualidad es de noventa y siete a uno. Como causa fundamental de los fenómenos migratorios aparece el espectro de la pobreza con toda su significación.

No faltaron datos que nos hacen pensar, cual es el caso de lo que el ponente denomina la búsqueda  por los inmigrantes de incrementar su “esperanza de vida”, ya que en sus países de ori-gen la vida media es de poco más de cuarenta años de edad mien-tras que en Europa es de alrededor de ochenta años, con lo que la emigración es un camino hacia poder vivir más años y más deco-rosamente; en Francia existen más médicos senegaleses que en el propio Senegal y son recibidos desde su antigua colonia con una preparación que no le ha costado dinero al estado francés; una tra vesía del estrecho de Gibraltar en un transbordador cuesta cuaren- ta y cinco euros y un viaje en patera le cuesta al inmigrante mil quinientos euros y además pueden tener un irónico abono de que si lo rechazan pueden tener hasta tres intentos por dos mil euros.

También deshizo el ponente algunos tópicos sobre el coste que para la sanidad española supone el atender a los extranjeros y las cifras son contundentes: la mayor parte de estos extranjeros son provenientes del Reino Unido y de Alemania y los del Tercer Mundo apenas son perceptibles. Y muchos datos más: los inmigrantes aportan el cincuenta por ciento del superávit anual de la Administración Pública española, incrementan la natalidad y aportan tareas y oficios muy necesitados en España cuales  son  la  construcción, hostelería  y agricultura. Una  buena

 

 

comparación  es  la de que la cifra de inmigrantes en España es un diez por ciento de su población, desigualmente distribuida, ya que en  provincias  como  Madrid es el 17% y en Alicante es algo menos; mientras que los mayores somos casi un 20%, con lo que podemos hacernos un juicio de lo que suponen ambos sectores en cuanto a su presencia o ausencia en los medios de comunicación u opinión.

También hubo una especial referencia a la labor económica y social que en el campo de la inmigración está haciendo la Caja de Ahorros del Mediterráneo y que no sólo se limita a atender en sus oficinas los envíos y remesas que realizan, sino que les atiende de forma integral. Y la propia O.B.S. de nuestra entidad ha dedicado una parte de su dotación a talleres, ayudas y prestaciones.

La conclusión final es tan amplia como analítica y, desde luego, solamente con lo que hemos resumido podemos darnos una pequeña idea de lo que supone la interculturalidad que está apareciendo. En nuestras manos está el que la integración de estas personas sea lo noble que se merecen, y no está de más que recordemos que España fue tiempo atrás un país de emigrantes. Y no dejemos de añadir lo que podemos suponer los mayores en estos temas, ya que la propia idea de mayor conlleva la de evitar extremismos, y puede ser nuestro papel el de la búsqueda de equilibrio entre posturas de uno u otro lado, rompiendo las barreras creadas y actuando socialmente para su integración.

 

Sugestivo igualmente resultó el debate posterior en el que hubo múltiples intervenciones que siguieron la línea de haber descubierto una nueva forma de entender el fenómeno migratorio, sus causas y la interculturalidad que genera.

Con este XXI Foro de Debate se cierra el Segundo Ciclo hasta el próximo mes de octubre de 2007, en el que se iniciará el Tercer Ciclo Cultural de JUBICAM (2007-2008) y que tiene previsto desarrollar un interesante programa de trabajo en áreas y grupos que demandan atención y en los que contaremos con diversos apoyos de la CAM, de la Univer-sidad de Alicante y de múltiples organismos.             Un abrazo a todos.

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