Nos llega la feliz noticia de que el Instituto de Estudios Históricos del Sur de Madrid “Jiménez de Gregorio” prepara los fastos para celebrar tan magno acontecimiento, pues el 30 de mayo de 2011 cumple nuestro admirado y querido amigo los cien años.

     La última vez que tuve la suerte de saludarlo, nada más verme me dijo: Hola, Miguel, qué hay por San Javier”; hasta tal punto me emocionó aquel cariñoso saludo que cuando llegó la hora de entregarle los recuerdos de que era portador no pude evitar mi emoción y mi congoja.

     Cuando el ilustre catedrático don Fernando Jiménez de Gregorio, en su calidad de Cronista Oficial de su Villa natal de Belvis de la Jara y de la provincia de Toledo, recibió la convocatoria para el XXVII Congreso de los Cronistas Españoles, fue tal la alegría que experimentó al saber que se celebraría en Murcia y que uno de sus días estaría dedicado a San Javier, que de inmediato se puso en contacto con el coordinador del Congreso y Presidente de los Cronistas murcianos, don José Antonio Melgares Guerrero, para recabar toda clase de detalles sobre este acontecimiento, hasta el punto que, pese a sus noventa y pico de años, decidió inscribirse como congresista, pues, según decía Melgares, al que llamó varias veces, no podía desaprovechar la ocasión para recordar aquellos años en Murcia, en los que tuvo ocasión de hacer tantos amigos y tan buenos y, por supuesto, aquellas visitas a la Encañizada, origen de su estudio sobre la historia de San Javier, primero para la creación de su escudo heráldico y más tarde para “San Javier en la Historia del Mar Menor y su Ribera – Repoblación y poblamiento del campo murciano.”

     Los de San Javier no agradeceremos nunca bastante las muchas horas de don Fernando en los archivos de la capital murciana para recopilar datos, que hicieron posible la publicación en 1955 de la primera historia de nuestro pueblo.

     En sus “Breves palabras a la 2ª edición”, en 1983, dice: “Hace 25 años que publicaba mi obrita El municipio de San Javier en la historia del Mar Menor y ahora, al releerla, vuelven a mí personas entrañables y hechos de los queridos años murcianos, uno de los períodos más fecundos y plenos de mi vida; y todo esto viene porque el día 22 de diciembre de 1982 recibí la apreciada visita de José Ortiz Silla, teniente de alcalde-delegado de cultura de aquel Ayuntamiento, y de José Nieto Antolinos, vocal de la Casa de Murcia en Madrid, para interesar mi licencia y reeditar el facsímile o en nueva reimpresión el mentado libro, de difícil consulta por las carencias de ejemplares.”

     Que Jiménez de Gregorio, después de tantos años, guarde tan gratos recuerdos de nuestra tierra y no dudara en volver aprovechando la coyuntura que le proporcionaba el Congreso, fue motivo de íntima satisfacción para las gentes de nuestro pueblo, y muy especialmente para cuantos se han aprovechado de las investigaciones del ilustre catedrático para posteriores estudios y publicaciones de todo género, pues todo aquello fue la base de nuestra historia.

     Hace un tiempo el Cronista de Getafe, señor De la Peña, me llamaba desde “El Pedruchillo”, en La Manga, donde viene pasando sus veranos, para decirme que quería venir a saludarme y al propio tiempo que le acompañara a ver la calle que al catedrático Jiménez de Gregorio le tenía dedicada San Javier, pues habían creado una institución denominada “Jiménez de Gregorio” para la que estaban recopilando publicaciones y detalles sobre su vida y quería ofrecerle unas fotografías, pues se mostraba muy contento de que nuestro pueblo hubiera tenido con él este detalle. Le facilité las fotografías de su calle que, por cierto, se inicia en la Avenida de la Aviación Española, entre la farmacia de Matilde Fernández y Novo Óptica y termina con el chalet del doctor Bueno y los jardines de la Residencia San José, y le di cuanta información estuvo a mi alcance, pues coincidía que yo era concejal cuando Andrés Vázquez nos propuso que Jiménez de Gregorio y Almela hicieran los trabajos para el Escudo Heráldico, tan del agrado de todos que dio origen al posterior encargo de la Historia a que nos venimos refiriendo.

     Se confirmó la visita a San Javier del catedrático Jiménez de Gregorio, de tan grato recuerdo para todos, formando parte del grupo de congresistas que sería recibido por nuestro Alcalde el sábado 13 de octubre de 2001, a la una del mediodía en el Museo Municipal, donde recibió los testimonios de cariño de cuantos tuvimos la suerte de estar allí ese día.

     Recuerdo que, cuando vio de nuevo La Manga, a cuyo estudio tanto tiempo había dedicado, exclamó con admiración: “Esto se ha convertido en un pequeño Nueva York.”

     Don Fernando, estamos felices de este homenaje que se le tributa. Sepa que el corazón de las gentes de San Javier estará allí.