La vida es una poesía,
empieza en un papel en blanco
sin conocer el resultado.
Hay vidas alegres y optimistas,
poesía llena de palabras divinas,
hay vidas tristes y pesimistas,
poesía de dolor, agonía.
Al igual que un músico
empieza sin notas un pentagrama,
el pintor lienzo en blanco
se dispone a dibujarlo
sin conocer el resultado.
Cuando el poeta acaba su poesía,
el músico su composición,
el pintor su cuadro,
algo así es el final de nuestros días,
sin conocer lo que se nos avecina.
Corta resulta mi vida,
el tiempo transcurre muy deprisa,
pienso que se me olvidó algo por hacer,
pero lo más importante es que viví con placer,
lo que se perderá en el olvido,
excepto en mis seres queridos,
sin el resultado conocer.